La Audiencia Provincial de Valencia ha dado un duro palo al ex presidente del Valencia, Vicente Soriano, en el litigio que mantiene con Juan Soler, también ex mandatario del club de Mestalla, por el caso de la frustrada compra venta de acciones por parte de la empresa Dalport en junio de 2009. En su día, el jugado de primera instancia número 20 había dado la razón a Soriano y a la firma uruguaya, que evitaban de este modo indemnizar a Soler.
El litigio se originó a partir de julio de 2009, fecha del vencimiento del primero de los tres pagarés con los que Dalport debía pagar a Juan Soler a cambio del traspaso de las acciones del Valencia, propiedad del constructor, a la firma presidida por Víctor Vicente Bravo.
La empresa uruguaya se iba a hacer con el 50,3% del accionariado del club (el 37% de los títulos procedía de Juan Soler, que a cambio iba a percibir unos 85 millones). Finalmente el consejo de administración del club atajó la operación al efectuar una ampliación de capital de 92 millones de euros. Dalport tampoco pagó a Soler por sus acciones, por lo que el constructor decidió llevar a los tribunales tanto a la firma como a Soriano, quien intercedió en la operación, por cada uno de los pagarés que dejó de cobrar.
En el primero de los casos, el juzgado de primera instancia dio la razón a Soriano. Soler recurrió, y ahora la Audiencia Provincial se ha posicionado a su favor. «El fallo nos parece injusto, tanto a mis asesores como a mí, y por tanto vamos a apelar a cuantos foros judiciales tengamos derecho para clarificar los hechos», señaló ayer un dolido ex presidente.
Soriano tiene ahora la oportunidad de recurrir al Supremo para evitar verse perjudicado por una operación en la que siempre ha insistido que se embarcó con la intención de beneficiar y salvar al Valencia. «Hay un par de personas que conocen muy bien este asunto y que llevarán una espina clavada en su conciencia de por vida. Que Dios los bendiga. No tengo nada más que decir, no pasa de ahí mi preocupación».
La batalla por el caso Dalport continúa por el segundo de los pagarés, caso en el cual el juzgado de primera instancia falló a favor de los intereses de Juan Soler. Además, está el litigio pendiente por el tercero de los plazos.
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