El agente de Otamendi la lía con unas declaraciones contra el club y Salvo le deja claras las cosas al poco tiempo. El argentino sigue callado
Todo era maravilloso en el Valencia CF hasta que llegó Eugenio López y la lío con unas declaraciones tremendas sobre el futuro de Nico Otamendi. El caso Otamendi ha empezado antes de lo esperado y de muy malas formas. El agente del argentino, Eugenio López, confirmó a los micrófonos de la Cadena Ser que Otamendi quería irse del Valencia y que ya se lo había dicho al club. El agente empezó a pegar verbalmente a los dirigentes del Valencia diciendo que 50 millones de euros por Otamendi era una precio fuera de mercado. Igual el iluminado de Eugenio López no se dio cuenta en su día, pero ese contrato con esa cláusula, lo firmaron él y obviamente el jugador. Ya sabían lo que había. Si es verdad que Otamendi quiere irse, la culpa es de los dos. Otamendi debe hablar si no quiere salir como un desagradecido y por la puerta de atrás.
Siempre fui partidario de hacerle más caso a los futbolistas que a los agentes por este tipo de declaraciones. Eugenio López acaba de convertir a Otamendi en 'Villano', cuando toda la temporada ha sido el héroe salvador del equipo Che. Aquí no hay que quitarle tampoco culpa al jugador, porque lo normal es que Otamendi le diera el ok a su agente para que actuase de ese modo tan directo y desagradable. A la afición del Valencia no le ha dado ni tiempo para celebrar el objetivo logrado de la temporada. Presionando al club solamente logrará desesperar a la afición y poner a su jugador en contra, algo que no siempre es beneficioso para cerrar las operaciones.
Por otro lado está Amadeo Salvo y su fuerte carácter, muy necesario para este tipo de situaciones. Salvo ya le cantó las cuarenta a Soldado y a Mathieu. Ambos salieron por su cláusula de rescisión obligados por el Valencia de Salvo. La pregunta ahora, tras la compra de Peter Lim, parece clara: ¿Permitirá Lim que Otamendi salga por menos dinero o seguirá la estela de Salvo y exigirá los 50 kilos por el argentino? Supuestamente deberían ir en concordancia, pero ojo que este sería el primer enfrentamiento serio entre presidente ejecutivo y el máximo accionista del club. Por el bien del Valencia, deben ir de la mano.
Capítulo aparte tiene Rufete, del cual no podré decir nada malo ya que es un trabajador al que no siempre le han dejado trabajar con total libertad. Algunos medios ya han contando que Nuno Espirito Santo quiere cargarse a Rufete para ejercer él de Manager total del club como hacen muchos técnicos en la Premier League. Tengamos los pies en el suelo señor Nuno, que usted está aquí por lo que está. No nos crezcamos tan rápido que no hemos ganado nada. Nuno tiene esta tarde una rueda de prensa en Nueva York que será probablemente la mas dura de encarar porque le van a preguntar por este asunto tan delicado. Muy atentos a sus palabras.
Por último, me gustaría recalcar el buen momento que vive el Valencia, tanto en lo deportivo como en lo económico. Los equipos grandes de Europa ya no pueden venir al Valencia con cuatro euros para llevarse a sus estrellas. Se acabó el vender a las estrellas por debajo del precio pactado en su cláusula. Que sigan así.
http://www.deportevalenciano.com/2015/05/26/caso-otamendi-agente-circo-heroe-callado
Todo era maravilloso en el Valencia CF hasta que llegó Eugenio López y la lío con unas declaraciones tremendas sobre el futuro de Nico Otamendi. El caso Otamendi ha empezado antes de lo esperado y de muy malas formas. El agente del argentino, Eugenio López, confirmó a los micrófonos de la Cadena Ser que Otamendi quería irse del Valencia y que ya se lo había dicho al club. El agente empezó a pegar verbalmente a los dirigentes del Valencia diciendo que 50 millones de euros por Otamendi era una precio fuera de mercado. Igual el iluminado de Eugenio López no se dio cuenta en su día, pero ese contrato con esa cláusula, lo firmaron él y obviamente el jugador. Ya sabían lo que había. Si es verdad que Otamendi quiere irse, la culpa es de los dos. Otamendi debe hablar si no quiere salir como un desagradecido y por la puerta de atrás.
Siempre fui partidario de hacerle más caso a los futbolistas que a los agentes por este tipo de declaraciones. Eugenio López acaba de convertir a Otamendi en 'Villano', cuando toda la temporada ha sido el héroe salvador del equipo Che. Aquí no hay que quitarle tampoco culpa al jugador, porque lo normal es que Otamendi le diera el ok a su agente para que actuase de ese modo tan directo y desagradable. A la afición del Valencia no le ha dado ni tiempo para celebrar el objetivo logrado de la temporada. Presionando al club solamente logrará desesperar a la afición y poner a su jugador en contra, algo que no siempre es beneficioso para cerrar las operaciones.
Por otro lado está Amadeo Salvo y su fuerte carácter, muy necesario para este tipo de situaciones. Salvo ya le cantó las cuarenta a Soldado y a Mathieu. Ambos salieron por su cláusula de rescisión obligados por el Valencia de Salvo. La pregunta ahora, tras la compra de Peter Lim, parece clara: ¿Permitirá Lim que Otamendi salga por menos dinero o seguirá la estela de Salvo y exigirá los 50 kilos por el argentino? Supuestamente deberían ir en concordancia, pero ojo que este sería el primer enfrentamiento serio entre presidente ejecutivo y el máximo accionista del club. Por el bien del Valencia, deben ir de la mano.
Capítulo aparte tiene Rufete, del cual no podré decir nada malo ya que es un trabajador al que no siempre le han dejado trabajar con total libertad. Algunos medios ya han contando que Nuno Espirito Santo quiere cargarse a Rufete para ejercer él de Manager total del club como hacen muchos técnicos en la Premier League. Tengamos los pies en el suelo señor Nuno, que usted está aquí por lo que está. No nos crezcamos tan rápido que no hemos ganado nada. Nuno tiene esta tarde una rueda de prensa en Nueva York que será probablemente la mas dura de encarar porque le van a preguntar por este asunto tan delicado. Muy atentos a sus palabras.
Por último, me gustaría recalcar el buen momento que vive el Valencia, tanto en lo deportivo como en lo económico. Los equipos grandes de Europa ya no pueden venir al Valencia con cuatro euros para llevarse a sus estrellas. Se acabó el vender a las estrellas por debajo del precio pactado en su cláusula. Que sigan así.
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