Nuno le pidió para el reto del estreno el mismo rol que Javi Fuego, un cometido al que no está del todo habituado el exfutbolista del Benfica
El argentino se estrena cuajando un partido perfecto en la labor de contención
valencia. Ni periodo de aclimatación ni gaitas que valgan. El fútbol siempre deja resquicios por donde hacer saltar las normas lógicas. Llegó en la madrugada del martes, cuatro entrenamientos, un baño de masas en su presentación y el subidón que da ganarle al 'campeón del mundo'. Enzo Pérez ya tiene una peculiar historia que contar a sus nietos. Cuando los tenga claro está. Para él, ésta ha sido una semana de locos pero la ha exprimido a tope. Y a lo grande, que es lo que importa. Todavía ayer, tras la ducha, intentaba pausadamente hablar de estos primeros capítulos que ha vivido como valencianista.
En el autobús, en el camino del hotel a Mestalla, Rodrigo -ex del Benfica como él- le avisaba del recibimiento que la afición había preparado. Así es Mestalla y su gente: aquí no hay término medio y ahora toca el lado bueno. Por eso el aterrizaje de Enzo no ha podido tener mejor bendición que el triunfo contra todo un Real Madrid.
'Bueno, y ese Enzo que ha costado 25 millones... ¿qué tal? ¿los vale?' La tertulia posterior da como siempre ocurre para muchas interpretaciones. El precio en el fútbol a veces ofrece situaciones extrañas. Javi Fuego, por ejemplo, lo puso en primera línea de combate Braulio Vázquez a coste cero. Y ayer, a decir verdad, Enzo Pérez fue más Javi Fuego que el propio Javi Fuego. Tanto le han hablado Nuno y el propio centrocampista madrileño de lo que se esperaba de él que el argentino se marcó un partido superlativo en la corrección. Fue un reloj suizo. Tic tac. No dará las campanadas, pero tampoco ni se adelanta ni se atrasa. Fiable cien por cien. Así parece que es este internacional «total» como llegó a calificar Rufete
Anclado por delante de los tres centrales, al nuevo jugador del Valencia le correspondía esta vez la tarea de sanitario. A la más mínima herida, ahí estaba él para ponerle remedio y evitar que el equipo acabara desangrándose. Cada vez que un central avanzaba unos pasos, él ya sabía que tenía que proteger su posición. Su labor fue, además, la de dar cobertura de entidad a otro futbolista con amplitud de miras como André Gomes y al sentido de Parejo. Con ese tuvo bastante. El argentino lo hizo a la perfección. Ni un solo gazapo que enmarañe las anotaciones.
Bueno sí. Una. De la que seguramente ya ha tomado nota. Tal y como está hoy en día de sensible el fútbol español, lo mejor que pueden hacer los futbolistas es no calentar a los árbitros. Boca cerrada. A Enzo le traicionó el exceso de verborrea. Posiblemente hasta tuviera razón a la hora de expresar su queja a un Gil Manzano que veía como el enfrentamiento se iba calentando. Pero en la primera falta que cometió sobre Marcelo, tarjeta que te va. Lo de Gloval Respect habrá que explicárselo con más detalle, porque parece que no todos los profesionales lo tienen del todo claro. Tampoco es que mentara a ningún pariente lejano del árbitro extremeño, pero para él fue suficiente el «sos muy malo» que escuchó de su boca para que le bajara los humos con una amarilla. La primera en la liga española. Eso, teniendo en cuenta su rol ayer de 'hombre escoba', puede tener sus consecuencias. Aunque, a decir verdad, tampoco entró en faltas. Sólo dos, que no está pero que nada mal.
Lo mejor sobre él es que ya se sabe que para hacer de Javi Fuego está suficientemente capacitado. ¿Qué para eso haya que pagar 25 millones de euros? Pues, cada cual que lo interprete a su manera, pero de Enzo se espera mucho más. De hecho, es un futbolista acostumbrado a otras responsabilidades dentro del terreno de juego y para eso es para lo que, al fin y al cabo, lo ha contratado el Valencia o Peter Lim, que en este caso viene a ser lo mismo.
Sus compañeros están encantados con él. Para los que ya lo conocían, el partido que se marcó fue una confirmación de su nivel. Así, por ejemplo, se expresaba Otamendi -compañero de selección- al respecto: «No me sorprende nada su gran rendimiento. Lo conozco de hace tiempo. Sabe defender y atacar, y mantuvo el orden que tenía que tener. Es complicado debutar así ante un gran rival pero se dio la circunstancia. Lo felicito»
Diego Alves tuvo la habilidad de mostrarse con más tacto en sus manifestaciones y mencionó precisamente al compañero ausente por sanción: «Cuando llegan jugadores, así se adaptan muy rápido. Javi -Fuego- también es espectacular y todos ayudamos para conseguir el objetivo».
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