El Valencia se agarra al efecto Mestalla, donde encadena 25 partidos sin perder, para buscar el liderato ante el Bayern
AMPARO BARBETA
VALENCIA
VALENCIA
Hay mucho en juego. Las consecuencias del partido serán múltiples. Deportiva y económicamente. Ganar hoy al Bayern de Múnich colocaría al equipo en los octavos de final de la Liga de Campeones y al club, inmerso en una grave crisis económica, le permitiría ingresar un fijo de dieciséis millones de euros. Y respirar a falta de un partido para cerrar la liguilla. Empatar, ralentizaría la clasificación y convertiría el partido contra el Lille en una agónica final. Perder, echaría al traste el trabajo hecho y asfixiaría, aún más, financieramente al club.
Y, cuando empiece a rodar el balón en Mestalla, el Valencia ya sabrá del resultado entre el BATE y el Lille y cómo este influye en su clasificación.
Pero, para festejar o lamentar el resultado, primero habrá que jugar contra el vigente campeón de Europa. Un partido, a priori, desigual pero que puede nivelar el hecho de que, en Mestalla, el Valencia es un equipo «invencible», según el término utilizado por Adil Rami y que los datos corroboran: el Valencia encadena 25 partidos sin perder en casa en Liga, Liga de Campeones y Copa del Rey. Concretamente, en la Liga de Campeones, el Valencia está invicto desde el 29 de septiembre de 2010 cuando perdió con el Manchester United. Desde entonces, hilvana ocho partidos sin perder (Ranger, Bursasport, Schalke, Chelsea, Leverkusen, Genk, Lille y BATE). Y a esto se aferra el equipo. También a que sólo ha perdido uno de los trece duelos contra equipos alemanes jugados en Mestalla. Fue contra el Werder Bremen y Nelson Valdez fue quién anotó para el equipo alemán. Una derrota que supuso el inicio de una crisis deportiva que concluyó con la destitución de Claudio Ranieri.
Valencia y Bayern están empatados a nueve puntos, mientras que el BATE Borisov es tercero, con seis puntos, y recibe en su estadio al Lille francés, que todavía no ha puntuado. En la última jornada el Bayern recibe al BATE y el Valencia viaja a Francia.
Pero, para festejar o lamentar el resultado, primero habrá que jugar contra el vigente campeón de Europa. Un partido, a priori, desigual pero que puede nivelar el hecho de que, en Mestalla, el Valencia es un equipo «invencible», según el término utilizado por Adil Rami y que los datos corroboran: el Valencia encadena 25 partidos sin perder en casa en Liga, Liga de Campeones y Copa del Rey. Concretamente, en la Liga de Campeones, el Valencia está invicto desde el 29 de septiembre de 2010 cuando perdió con el Manchester United. Desde entonces, hilvana ocho partidos sin perder (Ranger, Bursasport, Schalke, Chelsea, Leverkusen, Genk, Lille y BATE). Y a esto se aferra el equipo. También a que sólo ha perdido uno de los trece duelos contra equipos alemanes jugados en Mestalla. Fue contra el Werder Bremen y Nelson Valdez fue quién anotó para el equipo alemán. Una derrota que supuso el inicio de una crisis deportiva que concluyó con la destitución de Claudio Ranieri.
Valencia y Bayern están empatados a nueve puntos, mientras que el BATE Borisov es tercero, con seis puntos, y recibe en su estadio al Lille francés, que todavía no ha puntuado. En la última jornada el Bayern recibe al BATE y el Valencia viaja a Francia.
Pellegrino no podrá contar con Fernando Gago que ayer no superó la prueba a la que fue sometido „padece una contractura en el sóleo de su pierna izquierda„. Ni con João Pereira „sufre una microrrotura fibrilar en el gemelo interno de su pierna derecha„. Dos ausencias que trastocan los planes del técnico y lo obligan a recurrir a otros jugadores. Por Gago, el jugador que le da criterio y organización al equipo, todo apunta que jugará David Albelda o, si busca mayor creatividad, Ever Banega, mientras que Barragán suplirá a Pereira y será quién tenga que batirse con el temible Ribery que ya está recuperado del golpe en la costilla que le impidió jugar contra el Núremberg.
El técnico recupera a Cissokho, que sancionado no jugó ante el Espanyol, así como a Ricardo Costa, que se perdió ese mismo encuentro por unas molestias gastrointestinales.
El técnico recupera a Cissokho, que sancionado no jugó ante el Espanyol, así como a Ricardo Costa, que se perdió ese mismo encuentro por unas molestias gastrointestinales.
El Bayern llega con la baja de Robben, que tiene problemas musculares, y la duda de Franck Ribery que no jugó contra el Núremberg . Un partido que el Bayern empató y en el que Heynckes optó por reservar a jugadores como Lahma. Mario Gómez, tras haberse perdido todo lo que va de campaña por una lesión de tobillo, forma parte de la convocatoria pero no es probable que juegue dado el buen rendimiento de Mandzukic y Claudio Pizarro. Mandzukic suele ser titular en la Bundesliga, mientras en Europa Heynckes antepone a Pizarro por su experiencia. Además, Pizarro llega a Mestalla con el aval de triplete en la goleada (6-1) al Lille. En la defensa, aunque Badstuber ya se ha recuperado de su lesión muscular, y estuvo el sábado en el banquillo, es de esperar que Van Buyten vuelva a formar pareja de centrales con Dante. Con unos u otros sobre el césped, el premio es tal que el espectáculo y la competitividad están garantizados.
http://www.levante-emv.com/deportes/2012/11/20/fortin-coloso/953242.html
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