El Valencia necesita mantener el espíritu europeo mostrado el pasado jueves para no perder la tercera plaza en la Liga. Contra el AZ Alkmaar se vio al equipo que los aficionados quieren y que no ha dado señales de vida en las últimas semanas. Por eso la de esta noche es la primera de las tres decisivas pruebas que afrontarán los blanquinegros en los próximos siete días para recuperar el nivel que se han dejado por el camino.
En el vestuario quieren volver a sentir el apoyo de la afición, pero para eso deben recuperar el carácter ganador. Emery dijo hace unas semanas que quería devolver los pañuelos al bolsillo y ante los holandeses no se vio ninguno. Actuaciones como la del jueves y plantear un encuentro competitivo hoy, sin bajar los brazos y con opciones de victoria ante un grande son los 'peros' que le faltan al equipo para conectar con la grada. Por eso lo de esta noche tiene todavía más valor del normal.
Sería un golpe de efecto, una machada nada menos que en el Bernabéu, ante un Real Madrid que bate récords goleadores y que arrolla a cualquier rival que se le ponga por delante, con la firma intención de romper la hegemonía del Barcelona en lo más alto de la clasificación. Emery no sabe lo que es puntuar en el campo merengue. En Liga, incluso, ni marcar. Nunca ha visto puerta el cuadro valencianista con el vasco en el banquillo en la competición regular. El entrenador de Hondarribia no se puede permitir otro tropiezo. La racha negativa ya se alarga tres partidos y el colchón con el Málaga se ha reducido a la mínima expresión, por lo que una derrota en casa del líder puede dejar al equipo fuera de la tercera plaza si los andaluces ganan al Racing mañana en La Rosaleda.
Para el encuentro, el Valencia recupera a Soldado y Jordi Alba, ausentes ante el Levante por sanción y que fueron claves en la goleada en la Europa League. El capitán se enfrentará a Raúl Albiol, al que conoce desde que eran niños. El central ha aprovechado la baja de Pepe estas últimas jornadas y ahora la de Sergio Ramos en el centro de la zaga para hacerse un hueco en la defensa y protagonizará un gran duelo de valencianos.
El otro gran protagonista es David Albelda. El de la Pobla Llarga fue la ausencia más notable en la convocatoria facilitada ayer. Emery ya lo dejó fuera de la lista el jueves junto a Víctor Ruiz y eso hacía pensar que ambos jugarían hoy, pero sorprendentemente el veterano futbolista no viajará esta mañana en AVE hacia la capital de España por decisión técnica de su entrenador. El mediocentro sostuvo al equipo la temporada pasada en el Bernabéu hasta que fue expulsado injustamente, y a partir de ahí, el Valencia encajó los dos goles con los que cayó derrotado.
Junto a Albelda se quedan en tierra Dealbert, Bruno, Canales y Miguel. El portugués no acaba de entender por qué no se cuenta con él al estar recuperado. Ayer Emery dio su explicación: «Ha estado dos meses fuera del equipo, lleva una semana de entrenamientos, iremos valorando el estado físico para poder jugar, pero dos meses es tiempo y necesitará entrenamientos».
Sin Bruno ni Miguel, Barragán es el único lateral derecho, una opción arriesgada, ya que el entrenador confía más en él ofensivamente que en la línea defensiva. Teniendo en cuenta que delante tendrá a Cristiano Ronaldo, las incorporaciones al ataque del ex del Valladolid pueden convertirse en temerarias. A la contra, los de Mourinho son demoledores.
Los datos hablan por sí solos. Cien goles en Liga, a sólo siete del récord histórico en la competición con Toshack y la Quinta del Buitre en la campaña 1989-90. 37 tantos lleva el portugués, que por segunda temporada consecutiva pulverizará los guarismos que parecían eternos de Zarra y Hugo Sánchez. La voracidad de este equipo no tiene límites, por eso es una gran prueba de fuego para Rami y Víctor Ruiz, que necesitarán su mejor nivel para que el Valencia se mantenga vivo y con opciones.
La soberbia actuación del francés ante el AZ, con doblete incluido, le dan moral para medirse a los blancos. El que también estará motivado es Parejo, criado en la cantera madridista pero al que le cerraron las puertas del primer equipo. Está creciendo con la continuidad en el once y hoy junto a Topal tiene una nueva oportunidad.
Los blanquinegros no ganan en Liga desde el 18 de marzo en San Mamés y en todo este 2012 sólo han conseguido tres triunfos, una mala racha que les ha llevado a echar a perder la ventaja respecto a la cuarta plaza de la clasificación. Por eso los seguidores han perdido la paciencia y la confianza, y en esta recta final de la temporada el equipo necesita revertir esa dinámica para garantizarse su presencia la próxima temporada en la Champions.
La mejor forma de hacerlo es esta noche, poniendo la Liga patas arriba. El Barcelona está inmerso en una persecución al líder, pero el Real Madrid aguanta los envites. Tras la victoria de anoche de los azulgranas en Zaragoza la distancia entre los dos primeros es de sólo tres puntos, lo que crea una gran presión para los blancos.
El Valencia debe saber jugar con ese arma para que la ansiedad perjudique al rival. El Málaga, rival directo por el tercer puesto, ya lo hizo y se llevó un valioso empate. Los de Mestalla firmarían sumar un punto esta noche, siempre que se hiciera bueno el miércoles en casa ante el Rayo.
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