La portería del Valencia se ha convertido en el camarote de los hermanos Marx. Tras el anuncio del fichaje de Diego Alves y la renovación de Vicente Guaita, el equipo cuenta ahora mismo con cuatro guardametas, ya que a los anteriores se suman Miguel Ángel Moyà y César Sánchez, cuyo contrato acaba a finales de junio.
Ayer se abrió con fuerza una puerta de salida para el meta balear, puesto que el Getafe ya ha solicitado al Valencia una cesión. Ángel Torres, presidente del club madrileño, admitió el interés y lo vinculó a la grave lesión de Óscar Ustari. Sin embargo, el acercamiento es anterior.
Torres incluso aludió a las buenas relaciones entre ambos clubes para que la operación se lleve a cabo. El meta argentino sufrió anteayer una rotura de los ligamentos cruzados de su rodilla derecha durante la concentración con su selección nacional. Podría pasarse al menos seis meses de baja y se perdería el inicio de la próxima Liga.
El agente de Miguel Ángel Moyà, Manuel García Quilón, aseguró por su parte no haber recibido todavía ninguna comunicación ni del Getafe ni del Valencia sobre la cesión de su representado. «Creo que está todo muy verde», se limitó a apuntar.
Moyà, no obstante, ya ha hablado abiertamente sobre su salida del Valencia. «A ver si me voy cedido. Y si es traspasado, pues perfecto, tampoco pasa nada», manifestó en una entrevista emitida ayer por LAS PROVINCIAS Punto Radio (92.0 FM). Estas declaraciones se produjeron después de que el entrenador blanquinegro, Unai Emery, le expresara directamente lo que era un secreto a voces: que no cuenta con él, al menos el año que viene. «Es una situación incómoda», reconoció Moyà, quien agregó no sentirse sorprendido después de conocer el fichaje de Diego Alves, procedente del Almería.
La marcha de Moyà implicaría un cambio de perspectiva con respecto a César Sánchez. El veterano meta extremeño acaba su contrato el 30 de junio y el Valencia de momento no mueve ficha. La empresa que representa al futbolista lleva ya tiempo sondeando posibles alternativas, aunque el primer deseo de César sería continuar en Mestalla.
Si no hay una llamada anterior, su agente confirmó que se dirigirá al club en los próximos días para que concrete cuáles son sus intenciones. Emery quiere que se quede como tercer portero, pero la secretaría técnica, con el beneplácito del presidente, baraja que esa plaza la ocupe el arquero del filial.
Lo evidente, aunque todavía falta mucho para que empiece la Liga y se cierre el mercado, es que los representantes de César no van a esperar hasta el último momento. El Villarreal permanece al acecho.
Mientras tanto, el coordinador de la secretaría técnica del Valencia, Braulio Vázquez, estuvo anteayer en Madrid en una reunión de directores deportivos. Entre sus prioridades de búsqueda se encuentran un central y un lateral derecho. No se desplazó a Francia para negociar por el delantero Kevin Gameiro porque es una opción que ya ha quedado en manos del presidente, Manuel Llorente. Ahora Braulio se centra en apuntalar la defensa.
Pregunta sobre Canales
Vázquez también aprovechó su visita a Madrid para tantear la situación del mediapunta Sergio Canales, cuyo futuro se sitúa fuera del Santiago Bernabéu. El contacto es uno de tantos que se realizan por estas fechas en prácticamente todos los clubes de Primera.
Tanto el agente del futbolista cántabro como fuentes del club de Mestalla confirmaron ayer por la tarde el interés, adelantado por la cadena SER. Antonio Mendoza, representante de Canales, explicó a LAS PROVINCIAS que la primera intención del Real Madrid es ceder al jugador, fichado del Racing de Santader el pasado verano por 5,5 millones. Ahora deberá contactar con la entidad merengue para saber si estaría dispuesta a un traspaso, la única opción que podría interesar al Valencia, aunque eso no quiere decir que Canales vaya a venir. De hecho, fuentes del club blanquinegro insistían en relativizar el interés por el exracinguista.
Quien sí lo quiere es el Villarreal, club a priori más atractivo para Canales junto con el Valencia, según el agente. En La Plana se maneja una cifra orientativa de 12 millones, pero el representante comentó ayer que en caso de que el Madrid aceptara un traspaso podría rondar el precio que se pagó en 2010 al Racing.
La ficha del futbolista no representaría un gran impedimento, aunque sí podría serlo la duración del contrato, porque a Canales aún le quedan cinco años en el Real Madrid.
Una de las trabas a la operación podría llegar desde el terreno estrictamente deportivo, ya que no se trata de una de las prioridades del Valencia en estos momentos. Para el ataque, la auténtica obsesión de Llorente y Braulio es Kevin Gameiro. «Seguro que no juega en el Mestalla», bromeó ayer el dirigente cuando se le preguntó por el francés en la celebración del filial en la Basílica.
Gameiro, que se encuentra concentrado con su selección para el partido que les enfrenta mañana a Bielorrusia, se pronunció ayer con respecto a su futuro.
«La elección de mi próximo club la pensaremos más adelante, pero espero que sea poco después de que termine con la selección», declaró el delantero del Lorient, en referencia a un plazo de unas dos semanas, tras los encuentros de clasificación para la próxima Eurocopa 2012.
«Me encanta España, tocan mucho la pelota, que es el juego que me encanta. Si voy al extranjero será para jugar en la Liga de Campeones. Me gustaría jugar en España, tengo ofertas», reiteró Gameiro, que evitó referirse al Valencia, con quien alcanzó hace tiempo un acuerdo. El Sevilla fue otro club que se barajó, pero quedó descartado.
«Si voy a un equipo no es para sentarme en el banquillo, si me dan oportunidades tendré que demostrar lo que valgo. Soy joven y tengo 24 años», agregó Gameiro.
En la vorágine de fichajes y cesiones, ayer volvió a surgir el nombre del mallorquinista 'Chori' Castro. Un error en la redacción de su contrato fijó su cláusula de rescisión en 18.000 euros, en lugar de en 18 millones (faltarían tres ceros). En cualquier caso si el Valencia puja por el jugador lo hará a través del Mallorca.
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