Adil está entrenándose". La respuesta proviene de una de las hermanas de Rami, central francés que salvo contratiempo inesperado jugará en el Valencia a partir de la próxima temporada. La Liga francesa está de vacaciones y el Lille no disputará partido alguno hasta el próximo 8 de enero, aún así Rami cumple diariamente con su culto al cuerpo y la tabla de ejercicios para no perder la forma. A la hermana del internacional no le sorprende lo más mínimo la llamada de un medio de comunicación español aunque sí quiere saber el motivo de la misma para transmitirle el mensaje a Rami. "¿Para preguntarle por el Valencia? Llámenle un poco más tarde, no creo que tarde mucho en llegar", responde con naturalidad.
Desde que se difundiera el pasado 21 de diciembre que Valencia y Lille han llegado a un principio de acuerdo por seis millones para el traspaso del central, Rami no ha hecho declaración alguna al respecto. El galo ha aprovechado el parón navideño para desconectar y refugiarse en la familia. Pero AS pudo ayer contactar con él.
Pese a estar en sobreaviso por su hermana de la llamada de este diario, Rami descuelga y atiende con amabilidad, aunque responde con pies de plomo a las (pocas) preguntas que se deja hacer. Lo primero que matiza es que está de "vacaciones en familia y no quiero hacer entrevistas". La postura de Rami es lógica. El traspaso todavía no es oficial y tiene contrato con el Lille, por lo que durante seis meses debe saber compaginar presente y futuro, además de convivir con su actual afición. El mutismo forzado y autoimpuesto por Rami para evitar meterse en charcos queda reflejado en la siguiente frase: "¿Que si jugaré en el Valencia?", silencio, risa de complicidad y un "lo siento, pero ahora no puedo decir nada. Más adelante podré hablar. Pregúntenle al Valencia". Lo dicho, si "más adelante" hablará del Valencia... es porque tiene algo que decir que ahora no debe.
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