El Valencia aseguró ayer que su deuda (18 según el club, 21 según las sentencias recogidas por este periódico) con la Agencia Tributaria está liquidada. Así lo confirmó la entidad tras la información aparecida ayer en Levante-EMV, en la que se revelaban las 25 condenas que ha ido acumulando el club con Hacienda desde 1997 por no tributar las nóminas de varios futbolistas. La mayoría de los fallos en contra del Valencia, como adelantó el diario en su edición de ayer, fueron por simular contratos de derechos de imagen para evitar el pago de los impuestos de la renta durante la década de los 90.
El Valencia aseguró ayer que el erario público no le reclama cantidad alguna de dinero, después de haber provisionado y pagado todas las deudas, cerradas en 2008, aunque existen algunas sentencias que no han sido ejecutadas tras las pertinentes reclamaciones al Tribunal Supremo. Según el club, todas las actas alcanzaron en su día una cantidad cercana a los 18 millones de euros, de los cuales en una cantidad aproximada de 6 millones fueron ganados en recursos estimados a favor del Valencia. Desde el año 2002 todas las cantidades satisfechas a Hacienda han sido pagadas en conformidad con los aplazamientos pactados entre las partes. El último pago data, asegura el club, del mes de julio de 2008.
Los impagos pendientes que tenía el Valencia correspondían a los contratos, entre otros, de futbolistas como Amedeo Carboni, Ariel Ortega, Fernando Cáceres y Goran Vlaovic. De todas las actas recibidas por el Valencia, unas se aceptaron -con pago aplazado- y otras se recurrieron al máximo organismo de justicia. Estas últimas, como marca la ley, fueron provisionadas por unos avales que el Valencia depositó ante Hacienda y no todas han sido ejecutadas, ya que el club está a la espera de una resolución judicial que dictará si debe o no pagarlas.
Como informó este periódico, el Tribunal Supremo también encontró irregularidades en los contratos del entrenador Claudio Ranieri y los jugadores Romario, Djukic, Claudio López, Popescu y Oscar García, en todos los casos por pagar sus nóminas a través de ficticios derechos de imagen que fueron pagados a través de sociedades radicadas en paraísos fiscales. A día de hoy, hay sentencias del Supremo de este último verano que favorecen a la Agencia Tributaria. Es el caso del contrato de Romario, por el que Hacienda reclama casi 300.000 euros y que la Audiencia Nacional refrenda.
En todos los casos, como obliga la ley, el Valencia se ha visto obligado a provisionar al erario público con avales, que van siendo ejecutados cuando las sentencias no le dan la razón, como ha ocurrido en la mayoría de los casos.
jueves, 18 de noviembre de 2010
El Valencia da por zanjada su deuda con Hacienda
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