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jueves, 18 de julio de 2013

Mannheim 0-0 Valencia

Un Valencia ';tieso'; como el césped

Piatti y Cartabia fueron los mejores en el ';bolo'; de Mannheim, en el debut de un participativo Banega, que fue capitán, y un flojo Feghouli Los hombres de Djukic evidencian su falta de rodaje y no pasan del empate ante un equipo de regional


JUAN CARLOS VILLENA | MANNHEIM..-


Segundo partido de la pretemporada para el Valencia y primer empate. El conjunto de Mestalla no pudo con el modesto Waldhof Mannheim, que milita en la primera categoría del fútbol regional de Alemania, evidenciando que a estas alturas del verano aún está lejos de su mejor versión. Algo que, por otra parte, tiene un componente de lógica. El cansancio acumulado en las piernas, que hizo que el preparador físico perdonara ayer por la mañana la mitad de las series de 1.000 metros programadas como trabajo en Speyer, sigue siendo uno de los aspectos que está condicionando el fútbol exhibido en las dos primeras citas de la pretemporada.
El sábado, ante el Sttutgart, el Valencia tendrá que mejorar mucho sus prestaciones para plantar cara a uno de los gallitos de la Bundesliga. Debutaron, eso sí, Banega y Feghouli, y el argentino, sin alardes, demostró que ha llegado en un mejor punto de forma que su compañero. Todavía faltan por incorporarse al equipo Guardado y sobre todo un Soldado que ayer vio desde la distancia cómo Negredo ponía rumbo al City, donde cobrará 4,7 millones de euros netos por cada uno de los cuatro años que ha firmado.
Volviendo a Mannheim, la velocidad de Piatti y el descaro de Cartabia fue de lo mejor del partido. Los dos argentinos se convirtieron en una pesadilla para los laterales del Mannheim en la primera parte. A falta de goles, lo más destacado del encuentro fueron algunos conceptos que Djukic está inculcando en Speyer y que ya se van plasmando en el campo. Javi Fuego, en las coberturas, y Alcácer, en la presión a la salida de balón rival, fueron dos ejemplos. La primera victoria del verano se sigue resistiendo. El sábado, tercera oportunidad ante el rival más complicado.
Ahí habrá más público porque ayer se acercaron algo más de 5.000 espectadores. Una cifra respetable si tenemos en cuenta que el Waldhof Mannheim milita actualmente en categoría regional. La particular Curva Nord del estadio estaba situada en el fondo Otto Siffling, un jugador local que maravilló a la Alemania futbolística en la década de los 30 y que falleció a los 27 años de forma repentina. Y es esa portería fue donde atacó el Valencia en la primera parte, con Piatti más incisivo.
El argentino fue un dolor de cabeza continuo para el lateral Nico Müller. Tanto fue así que, en pleno partido, su entrenador le llamó a la banda para darle algunas indicaciones. Pero Piatti siguió encontrando una y otra vez el hueco. El problema es que sus centros nunca tuvieron un rematador claro y en las veces que pudo lanzar a portería, Knodler despejó a saque de esquina. Hasta de ocho dispuso el Valencia en la primera parte. La rapidez de Pablo, los buenos movimientos en la presión de Alcácer, la movilidad en banda derecha de Pereira y Cartabia y la contundencia de Javi Fuego fueron las notas más destacadas en este arranque de partido.
En el inicio, el Mannheim quiso hacer disfrutar a su público, con Ozturk como el jugador más destacado. El delantero dispuso de la mejor ocasión de su equipo, tras una pérdida en el centro del campo del Valencia y una falta de entendimiento entre Mathieu y Ricardo Costa. Pero su lanzamiento lo repelió Diego Alves con su pierna derecha.
Viera bajó constantemente al centro del campo para recibir balones, pero el canario no estuvo tan acertado como frente al Karlsruher. Tampoco ayudó mucho el estado del terreno de juego, con un césped duro y seco que no colaboró en el espectáculo. En el minuto 28, Alcácer dispuso de una buena ocasión, tras el enésimo centro de Piatti, pero su remate mordido se marchó a las manos del portero alemán. El valenciano le pegó una patada a la ';hierba'; en señal de reprobación.
La primera parte acabó con varias jugadas de mérito de Fede Cartabia. El argentino volvió a salir de titular y demostró, como el domingo, que es un hombre a tener muy en cuenta en la presente temporada. Aunque será el propio Djukic el que decida su destino final. Pereira vio la amarilla, a dos minutos del descanso, por protestar al colegiado. Una de esas acciones que Salvo quiere que desaparezcan de todos los equipos del club como modelo de comportamiento. Ayer, por cierto, se supo que el juvenil valencianista participará a final de mes en un torneo que organiza el Dortmund, club que ha servido como modelo para este consejo y para su Fundación.
El brazalete, para Éver
Djukic charló de forma individual en el tiempo de descanso con Oriol Romeu. Y por sus gestos le pidió que ayudara a Banega en la salida de balón, algo lenta en la primera parte con Parejo y Javi Fuego. El argentino, que lució el brazalete de capitán por delante de Guaita tras la marcha del partido de Ricardo Costa, disputó sus primeros minutos de la pretemporada. Algo que también ocurrió con Feghouli. Víctor Ruiz y Rami evidenciaron más problemas para sacar el balón controlado, pero desde la banda no recibieron ningún reproche de Djukic. El técnico tiene muy claro que en su libro de estilo no entran los pelotazos. El francés intentó alguna subida al ataque y eso no gustó al cuerpo técnico.
Jonas, que actuó en punta de ataque, bajó constantemente al centro del campo a recibir balones. Como ya ocurriera en Karlsruhe, el brasileño no acabó de encontrar la conexión con Míchel. Algo que tampoco desespera a Djukic, puesto que son dos jugadores que llevan entrenando tan sólo unos días juntos. Una incursión por banda de Barragán, que lanzó a pierna cambiada cerca de la escuadra derecha del portero rival, fue la segunda oportunidad más clara del Valencia tras el descanso. Porque la primera fue para Jonas pero su disparo, de forma incomprensible, se marchó muchos metros por arriba.
Roberto Ibáñez volvió a ser el más participativo dentro de la segunda unidad. Un concepto baloncestístico que define a la perfección el trabajo táctico de los entrenamientos vespertinos en la concentración de Speyer. Djukic está comenzando a definir un esqueleto que se convierta en el primer equipo titular cuando comience la temporada oficial, que cuadra con los diez futbolistas de campo que han comenzado el encuentro tanto en Karlsruhe como en Mannheim.
Feghouli sólo apareció para disparar desviado a siete minutos del final del partido. El argelino sigue en su particular pretemporada tras ser uno de los últimos en llegar al Alemania. En el entrenamiento vespertino del martes ya evidenció gestos de fatiga en los ejercicios de ataque y defensa. Algo que ayer se comprobó sobre el terreno de juego.

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