El presidente del Valencia asegura que todas las decisiones sobre la plantilla las toma el director deportivo
J. M. B.
Minutos después de visitar Levante-EMV, Salvo explicó sus planes para cambiar el club en el programa Supermurcilágo, de Levante TV, donde aseguró, entre otras cosas, que la entidad deberá vender a varios jugadores «prescindibles» después del «duro revés» de haberse quedado fuera de la Liga de Campeones. «El palo de la Champions ha sido muy grande y vamos a tener que vender futbolistas», dijo, sin entrar en más detalles. Se le preguntó por los fichajes que realizará el Valencia esta pretemporada, pero Salvo aclaró, por si alguien todavía no lo sabe, que la planificación de la plantilla corresponde al director deportivo, Braulio Vázquez. «¿Cómo voy a influir sobre un cargo técnico que tiene mi confianza?», aseguró. «¿Si vamos a fichar a Iborra? Eso no lo tengo que decir yo», insistió el presidente, en un claro mensaje de la especialización del trabajo que imperará en el Valencia a partir de ahora. Cada uno se ocupará de su responsabilidad.
El futuro de David Albelda es uno de los frentes abiertos que ha heredado el consejo de Amadeo Salvo. «Es un ejemplo de profesional. Pero su continuidad es una decisión del director deportivo», insistió Salvo,.
Salvo subrayó el objetivo del club de convertirse en un referente del juego limpio. «Queremos ser la primera entidad deportiva de élite que lo pongamos en marcha. Vamos a establecer un método en la escuela. El primer equipo será la punta del iceberg del proyecto que iniciaremos con los canteranos», explicó. El abrazo con Vicente Andreu, por iniciativa de Jaume Ortí, durante la junta de accionistas es un gesto con el que ayer se recreaba. «Ha sido una transición larga, pero yo no tengo ningún motivo para no llevarme bien con Andreu», dijo.
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