"Hay que desterrar la idea de que es grave vender el club porque tendríamos un pacto de recompra", afirma el miembro de Sempre València
Miembro de Sempre València. El grupo de Fernando Gómez insiste en ofrecer un inversor del que solo se conoce su procedencia árabe. Romero sí desvela que esa inyección de capital iría más allá del club: «El fútbol va a ser un escaparate para mejorar las infraestructuras».
VICENT CHILET | VALENCIA
Parece que aumenta la necesidad de vender el club.
El 9 de enero ya dijimos que el futuro del Valencia es una calle en sentido único y ésa es la venta. Por decirlo fuimos vilipendiados y sufrimos ataques hasta en el plano personal.
¿Ataques?
Se nos ha faltado al respeto. Que si queríamos ser protagonista, que si utilizábamos la figura de Fernando, que si no éramos valencianistas, que si el inversor no existía...
Sí, es cierto que todavía no han dado a conocer su nombre.
El inversor nos pidió algo fundamental: respetar su confidencialidad. Tenemos dos prioridades: que a la Generalitat no le cueste un duro esta operación y la otra es que el inversor no salga engañado.
Ya se ha desvelado que el inversor es árabe. ¿Dar a conocer su identidad no les daría más credibilidad pública?
No vamos a entrar ni en pujas ni en subastas. Y si nos piden confidencialidad y exclusividad durante los meses de la negociación, lo cumpliremos. Si desvelamos su nombre se puede encarecer la operación, o se utiliza para negociar con otros. Nos vamos a dar cancha a esa dinámica. El inversor está dispuesto a sentarse y hablar, pero no a comprar a cualquier precio. Tenemos un inversor, no un «pagafiestas».
¿Bankia o el Consell les han dicho que ya quieren vender?
Eso lo sabemos igual que lo sabe la prensa. Cuando salimos a la palestra sí parecía que la venta era posible, después hubo un paso atrás por el tema del aval, y hace un par de días el presidente de la Fundación insistía en que no estaba en mente la venta. No es grave vender, hay que desterrar esa idea. Y nosotros defendemos la venta con un pacto de recompra a los dos años porque, dependiendo de lo que pase con las sociedades anónimas deportivas, que han agravado los pasivos de los clubes, nuestro objetivo sería democratizar el club. Tenemos conversaciones con todos los partidos para que sea un proyecto de consenso también social.
¿Estaban avanzadas las negociaciones de no haber sido por la sentencia del aval?
Ha influido. Explicar a un extranjero el interés en invertir en un club como el Valencia es complicado si le tienes que explicar el papel de la Generalitat Valenciana, Bankia, que se firmó un aval que no se sabe si vale, que tienes un campo parado... Pero no queremos engañarle, no como ha pasado con el del Málaga, y debe saberlo. Con todo eso hay intención de sentarse, hablar y ver hasta donde llegamos.
Persiste la idea de que una venta es mala.
Un director de un importante banco español presume de la llegada de dinero extranjero, que Bill Gates participa en una empresa del IBEX 35. Por eso me extraña que por un lado cause satisfacción y por otro algunos sectores vean mal que alguien de fuera pueda venir con interés para invertir, siguiendo la tendencia de los grandes clubes de Europa. Si queremos estar ahí hay que «ponerlos». Y habrá que cuidar y mimar a quien los ponga.
¿Intuyo de sus palabras que hay recelos en la clase empresarial valenciana a que un inversor extranjero controle una institución de tanto calado como el Valencia?
No creo que a nadie le venga mal. Todo es compatible. Además, no invertiría sólo en el Valencia y en el fútbol.
¿En qué más? ¿Infraestructuras? ¿En el puerto, ahora que no hay Fórmula 1 ni Copa América, ni subsede olímpica de vela?
La ciudad necesita una inyección y tiene muchas posibilidades de oferta. Nuestro propósito es que su inversión sea global. Pero global de verdad, con B. Sería además una manera de amarrar al inversor y que echase raíces en la ciudad. Queremos que el inversor, que mira por sus intereses, gane dinero, y necesariamente no tiene por qué ser sólo en el fútbol. El fútbol va a ser un escaparate para mejorar las infraestructuras.
¿Les consta que se haya negociado de forma paralela con otras opciones, como la de Rus?
Contactos se han tenido. Pero nosotros somos independientes y no somos ‘bizcochables’. Nuestro acuerdo no va a ser solo con Bankia y Consell, también por todos los partidos, porque el gobierno puede cambiar en democracia. El patrimonio está a dedo. El Señor nos lo da y el Señor nos lo quita. Y queremos que todos consensuemos un proyecto estable, y eso no pasa negociando sólo con quien ahora está en el gobierno.
¿Cuáles van a ser sus próximos pasos?
El inversor está tranquilo porque la deuda no es suya. Pero sí que hay desencanto. En enero nos decían que se iba a hacer un cuaderno de venta, y al final nada. Que si vendo, que si no. Queremos una declaración clara y pública por la que se diga: el Valencia se vende. Con nosotros habría un pacto de recompra.
VICENT CHILET | VALENCIA
Parece que aumenta la necesidad de vender el club.
El 9 de enero ya dijimos que el futuro del Valencia es una calle en sentido único y ésa es la venta. Por decirlo fuimos vilipendiados y sufrimos ataques hasta en el plano personal.
El 9 de enero ya dijimos que el futuro del Valencia es una calle en sentido único y ésa es la venta. Por decirlo fuimos vilipendiados y sufrimos ataques hasta en el plano personal.
¿Ataques?
Se nos ha faltado al respeto. Que si queríamos ser protagonista, que si utilizábamos la figura de Fernando, que si no éramos valencianistas, que si el inversor no existía...
Se nos ha faltado al respeto. Que si queríamos ser protagonista, que si utilizábamos la figura de Fernando, que si no éramos valencianistas, que si el inversor no existía...
Sí, es cierto que todavía no han dado a conocer su nombre.
El inversor nos pidió algo fundamental: respetar su confidencialidad. Tenemos dos prioridades: que a la Generalitat no le cueste un duro esta operación y la otra es que el inversor no salga engañado.
El inversor nos pidió algo fundamental: respetar su confidencialidad. Tenemos dos prioridades: que a la Generalitat no le cueste un duro esta operación y la otra es que el inversor no salga engañado.
Ya se ha desvelado que el inversor es árabe. ¿Dar a conocer su identidad no les daría más credibilidad pública?
No vamos a entrar ni en pujas ni en subastas. Y si nos piden confidencialidad y exclusividad durante los meses de la negociación, lo cumpliremos. Si desvelamos su nombre se puede encarecer la operación, o se utiliza para negociar con otros. Nos vamos a dar cancha a esa dinámica. El inversor está dispuesto a sentarse y hablar, pero no a comprar a cualquier precio. Tenemos un inversor, no un «pagafiestas».
No vamos a entrar ni en pujas ni en subastas. Y si nos piden confidencialidad y exclusividad durante los meses de la negociación, lo cumpliremos. Si desvelamos su nombre se puede encarecer la operación, o se utiliza para negociar con otros. Nos vamos a dar cancha a esa dinámica. El inversor está dispuesto a sentarse y hablar, pero no a comprar a cualquier precio. Tenemos un inversor, no un «pagafiestas».
¿Bankia o el Consell les han dicho que ya quieren vender?
Eso lo sabemos igual que lo sabe la prensa. Cuando salimos a la palestra sí parecía que la venta era posible, después hubo un paso atrás por el tema del aval, y hace un par de días el presidente de la Fundación insistía en que no estaba en mente la venta. No es grave vender, hay que desterrar esa idea. Y nosotros defendemos la venta con un pacto de recompra a los dos años porque, dependiendo de lo que pase con las sociedades anónimas deportivas, que han agravado los pasivos de los clubes, nuestro objetivo sería democratizar el club. Tenemos conversaciones con todos los partidos para que sea un proyecto de consenso también social.
Eso lo sabemos igual que lo sabe la prensa. Cuando salimos a la palestra sí parecía que la venta era posible, después hubo un paso atrás por el tema del aval, y hace un par de días el presidente de la Fundación insistía en que no estaba en mente la venta. No es grave vender, hay que desterrar esa idea. Y nosotros defendemos la venta con un pacto de recompra a los dos años porque, dependiendo de lo que pase con las sociedades anónimas deportivas, que han agravado los pasivos de los clubes, nuestro objetivo sería democratizar el club. Tenemos conversaciones con todos los partidos para que sea un proyecto de consenso también social.
¿Estaban avanzadas las negociaciones de no haber sido por la sentencia del aval?
Ha influido. Explicar a un extranjero el interés en invertir en un club como el Valencia es complicado si le tienes que explicar el papel de la Generalitat Valenciana, Bankia, que se firmó un aval que no se sabe si vale, que tienes un campo parado... Pero no queremos engañarle, no como ha pasado con el del Málaga, y debe saberlo. Con todo eso hay intención de sentarse, hablar y ver hasta donde llegamos.
Ha influido. Explicar a un extranjero el interés en invertir en un club como el Valencia es complicado si le tienes que explicar el papel de la Generalitat Valenciana, Bankia, que se firmó un aval que no se sabe si vale, que tienes un campo parado... Pero no queremos engañarle, no como ha pasado con el del Málaga, y debe saberlo. Con todo eso hay intención de sentarse, hablar y ver hasta donde llegamos.
Persiste la idea de que una venta es mala.
Un director de un importante banco español presume de la llegada de dinero extranjero, que Bill Gates participa en una empresa del IBEX 35. Por eso me extraña que por un lado cause satisfacción y por otro algunos sectores vean mal que alguien de fuera pueda venir con interés para invertir, siguiendo la tendencia de los grandes clubes de Europa. Si queremos estar ahí hay que «ponerlos». Y habrá que cuidar y mimar a quien los ponga.
Un director de un importante banco español presume de la llegada de dinero extranjero, que Bill Gates participa en una empresa del IBEX 35. Por eso me extraña que por un lado cause satisfacción y por otro algunos sectores vean mal que alguien de fuera pueda venir con interés para invertir, siguiendo la tendencia de los grandes clubes de Europa. Si queremos estar ahí hay que «ponerlos». Y habrá que cuidar y mimar a quien los ponga.
¿Intuyo de sus palabras que hay recelos en la clase empresarial valenciana a que un inversor extranjero controle una institución de tanto calado como el Valencia?
No creo que a nadie le venga mal. Todo es compatible. Además, no invertiría sólo en el Valencia y en el fútbol.
No creo que a nadie le venga mal. Todo es compatible. Además, no invertiría sólo en el Valencia y en el fútbol.
¿En qué más? ¿Infraestructuras? ¿En el puerto, ahora que no hay Fórmula 1 ni Copa América, ni subsede olímpica de vela?
La ciudad necesita una inyección y tiene muchas posibilidades de oferta. Nuestro propósito es que su inversión sea global. Pero global de verdad, con B. Sería además una manera de amarrar al inversor y que echase raíces en la ciudad. Queremos que el inversor, que mira por sus intereses, gane dinero, y necesariamente no tiene por qué ser sólo en el fútbol. El fútbol va a ser un escaparate para mejorar las infraestructuras.
La ciudad necesita una inyección y tiene muchas posibilidades de oferta. Nuestro propósito es que su inversión sea global. Pero global de verdad, con B. Sería además una manera de amarrar al inversor y que echase raíces en la ciudad. Queremos que el inversor, que mira por sus intereses, gane dinero, y necesariamente no tiene por qué ser sólo en el fútbol. El fútbol va a ser un escaparate para mejorar las infraestructuras.
¿Les consta que se haya negociado de forma paralela con otras opciones, como la de Rus?
Contactos se han tenido. Pero nosotros somos independientes y no somos ‘bizcochables’. Nuestro acuerdo no va a ser solo con Bankia y Consell, también por todos los partidos, porque el gobierno puede cambiar en democracia. El patrimonio está a dedo. El Señor nos lo da y el Señor nos lo quita. Y queremos que todos consensuemos un proyecto estable, y eso no pasa negociando sólo con quien ahora está en el gobierno.
Contactos se han tenido. Pero nosotros somos independientes y no somos ‘bizcochables’. Nuestro acuerdo no va a ser solo con Bankia y Consell, también por todos los partidos, porque el gobierno puede cambiar en democracia. El patrimonio está a dedo. El Señor nos lo da y el Señor nos lo quita. Y queremos que todos consensuemos un proyecto estable, y eso no pasa negociando sólo con quien ahora está en el gobierno.
¿Cuáles van a ser sus próximos pasos?
El inversor está tranquilo porque la deuda no es suya. Pero sí que hay desencanto. En enero nos decían que se iba a hacer un cuaderno de venta, y al final nada. Que si vendo, que si no. Queremos una declaración clara y pública por la que se diga: el Valencia se vende. Con nosotros habría un pacto de recompra.
El inversor está tranquilo porque la deuda no es suya. Pero sí que hay desencanto. En enero nos decían que se iba a hacer un cuaderno de venta, y al final nada. Que si vendo, que si no. Queremos una declaración clara y pública por la que se diga: el Valencia se vende. Con nosotros habría un pacto de recompra.
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