El central francés se ve obligado a aceptar la medida para jugar en el Milan
REDACCIÓN | VALENCIA.-
El Valencia ha encontrado la vía legal para tocar el bolsillo a Adil Rami sin vulnerar la normativa laboral que protege a los futbolistas. Según ha avanzado Nou Ràdio, las declaraciones contra Miroslav Djukic y el vestuario blanquinegro le costarán al central 125.000 euros, cantidad muy superior a los 8.800 que constituían el castigo máximo permitido.
La fórmula escogida por el club es la de la sanción encubierta. Una vez cerrado el acuerdo con el Milan, y con el jugador ya en la capital lombarda desde hace días, Amadeo Salvo puso sobre la mesa del futbolista un desafío.
Si quería cerrar su marcha al equipo italiano, duplicar el sueldo y tener una plataforma perfecta para reivindicarse de cara al Mundial, el único camino para ello era que renunciara a 125.000 euros del dinero que le tiene que abonar el Valencia en enero en concepto de ficha. De este modo nada podría hacer la AFE, ya que oficialmente no se trata de un castigo, sino de un acuerdo club-jugador.
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