PD CONFIDENCIAL. HOY Fue al lado de las oficinas del club antes del partido. Ahí ya conocían que Bankia aceptaba el voto del club
VALENCIA.
Aurelio Martínez y Amadeo Salco volvieron a abrazarse ayer en la previa del Valencia - Granada que se disputó en Mestalla.
Fue antes de acceder al estadio y al lado de las oficinas del club cuando el presidente valencianista se cruzó con el presidente de la Fundación, que iba acompañado por el patrono, José Luis Zaragosí, en plena Avenida Suecia y ambos se fundieron en un abrazo.
En ese momento ambos ya sabían que Bankia había terminado cediendo y había comunicado ya que aceptaba que el club estuviera en el proceso de venta de la socieda y que tuviera voz y voto.
Ese abrazo fue significativo ya que la relación entre ambos es muy distante y en los últimos tiempos ninguno de los dos ha compartido las maneras de actuar del otro. La última vez que Aurelio y Salvo se abrazaron fue cuando tras la Asamblea informativa en el estadio de Mestalla que ofreció el presidente del Valencia, Aurelio decidió aceptar que la Fundación liderara el proceso de venta.
Ahora parece que por fin hay un acuerdo para vender el club y llevar un proceso de venta pacífico. Casi con seguridad el motivo del abrazo fue conocer que el banco había aceptado que el club estuviera en el proceso como así había pedido la semana pasada el propio Aurelio Martínez.
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